Las compañías más exitosas del mundo buscan, a través de la innovación, desarrollar y mantener ventajas competitivas con respecto a su competencia. El desarrollo de tecnologías propietarias, “capturar” al cliente en su ecosistema y lograr economías de escala a nivel local son formas de crear barreras de entrada para mantener a la competencia a raya. La innovación tiene un rol fundamental en el juego de crear y mantener esas barreras de entrada que en definitiva permitan a una empresa ganar de forma consistente en el mercado en el que participa.
Existen empresas que han conseguido desarrollar y mantener barreras de entrada insalvables por sus competidores. Intel es un buen ejemplo. Actualmente posee el 80% del market-share del mercado de CPU*. AMD tiene el otro 20% del mercado. Pero en 2005 esa proporción era prácticamente 50 y 50. Intel ha logrado aumentar su market-share a través del desarrollo constante de tecnologías propietarias, alianzas clave con fabricantes de equipos que utilizan sus tecnologías. AMD se ha visto obligada a buscar otros nichos, por ejemplo, procesadores para tarjetas gráficas, dejando el mercado de los PC en un segundo plano y facilitando aún más el control de ese mercado por parte de Intel. Banderas blancas ondean desde el lado de AMD en el mercado de los PC.
Pero existe una razón de fondo para que esto ocurriera. La inversión en investigación, desarrollo e innovación. En 2017 Intel invirtió el 22% de su facturación en este concepto, equivalente a US$ 13 mil millones. La facturación de AMD en 2017 fue de poco más de US$ 5 mil millones. Intel invierte 2,5 veces la facturación total de AMD en I+D. Es muy difícil que AMD pueda volver a alcanzar el nivel de desarrollo tecnológico de Intel. Solo en 2017 a Intel le fueron asignadas más de 3 mil patentes: más de 3 mil nuevas posibilidades para construir posiciones monopólicas protegidas por años.
Desde 2005 Intel ha aumentado de forma progresiva su facturación y, al mismo, tiempo su inversión en I+D. Es una bola de nieve que refuerza su posición competitiva año a año, dólar por dólar, patente a patente. Transformándola en una empresa imparable.
¿Tenemos empresas imparables en Chile?. ¿Cuántas son capaces de mantener una posición competitiva global y sostenible?. ¿Cuántas invierten más del 10% de sus ventas en I+D y tienen a la innovación como la base de su estrategia competitiva?
Empresas como Hortifrut, Concha y Toro y Enaex, solo por nombrar algunas, son empresas chilenas en posiciones de liderazgo global en sus respectivas industrias. Han logrado avances notables en innovación e I+D, desarrollando capacidades y soluciones que les permitirán competir de mejor forma en el futuro. Son justamente algunas de las candidatas a transformarse en empresas imparables desde Chile para el mundo.
Columna publicada en El Mercurio el 4 de junio de 2018
*Después de la publicación de la columna se abrió la discusión sobre el mercado de las CPU, dominado por Intel, y el mercado de las GPU (mas conocidas como tarjetas de video) dominado por Nvidia. Se espera que a futuro las GPU sean mucho mas útiles en aplicaciones de inteligencia artificial y machine learning, por que están diseñadas para soportar una mayor capacidad de cálculo. Mientras una GPU soporta entre 100 y 4.000 núcleos, una CPU tiene solo entre 4 y 30 núcleos, lo que permite una mayor capacidad de procesamiento. El precio de la acción de Nvidia se han multiplicado por 8X en los últimos 2 años. AMD desde hace años se empezó a mover hacia este nicho. Todo lo anterior presenta un tremendo desafío para Intel, que ya anunció el desarrollo de soluciones para competir con Nvidia. Es muy difícil predecir el futuro, sin embargo, dada la estrategia e inversión en innovación e I+D de Intel me atrevo a decir que tarde o temprano también dominarán el mercado de las GPU.